Universo Abierto
·
Nov 29, 2025

El papel de la Inteligencia Artificial en la investigación científica: una perspectiva científica para las políticas europeas

Purificato, E., D. Bili, R. Jungnickel, V. Ruiz Serra, J. Fabiani, K. Abendroth Dias, D. Fernandez Llorca, y E. Gomez. 2025. The Role of Artificial Intelligence in Scientific Research: A Science for Policy, European Perspective. Luxemburgo: Oficina de Publicaciones de la Unión Europea. doi:10.2760/7217497. JRC143482. Texto completo La Inteligencia Artificial (IA) está transformando fundamentalmente el…


Purificato, E., D. Bili, R. Jungnickel, V. Ruiz Serra, J. Fabiani, K. Abendroth Dias, D. Fernandez Llorca, y E. Gomez. 2025. The Role of Artificial Intelligence in Scientific Research: A Science for Policy, European Perspective. Luxemburgo: Oficina de Publicaciones de la Unión Europea. doi:10.2760/7217497. JRC143482.

Texto completo

La Inteligencia Artificial (IA) está transformando fundamentalmente el proceso científico en todas sus etapas, desde la generación de hipótesis y el diseño experimental hasta el análisis de datos, la revisión por pares y la difusión de resultados. Este informe del Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea proporciona un análisis científico y técnico clave para fundamentar la Estrategia Europea para la IA en la Ciencia. La IA, impulsada por técnicas como el Aprendizaje Automático (ML), el Aprendizaje Profundo (DL) y la IA Generativa (GenAI), tiene el potencial de acelerar drásticamente los descubrimientos, fomentar la colaboración interdisciplinaria y mejorar la reproducibilidad en áreas críticas para la Unión Europea, como la salud, el cambio climático y las tecnologías limpias.

La IA se posiciona como un «científico co-asistente» a lo largo del ciclo de investigación. En la fase inicial, ayuda a acelerar el análisis de la literatura y a identificar lagunas de conocimiento, lo que facilita la formulación de hipótesis novedosas. En la fase experimental, permite el diseño automatizado de experimentos y la simulación, evolucionando hacia los «laboratorios autónomos» (self-driving labs). El ejemplo de AlphaFold en la predicción de estructuras proteicas es citado como un hito que demuestra el poder transformador de la IA en la aceleración de la verificación de hipótesis biológicas. Además, la IA es crucial en el procesamiento de datos masivos, ya que puede analizar vastos conjuntos de datos multimodales para detectar patrones y realizar descubrimientos en genómica, astronomía y otras ciencias computacionales que superan la capacidad de análisis humano. En la etapa de comunicación, las herramientas de IA son cada vez más utilizadas para la redacción científica, la edición, la visualización de datos y la superación de barreras idiomáticas.

A pesar de sus promesas, la integración de la IA en la ciencia conlleva desafíos importantes que requieren una gobernanza robusta. Los principales riesgos identificados incluyen el sesgo algorítmico, la posible proliferación de «alucinaciones» e información fabricada, la erosión potencial de las habilidades de pensamiento crítico y un fenómeno denominado deriva epistémica. Esta deriva describe la tendencia de la tecnología a reforzar inadvertidamente los paradigmas de investigación existentes, lo que podría limitar la diversidad de las preguntas científicas exploradas o separar las conclusiones científicas de una supervisión humana crítica. Para afrontar estos riesgos y maximizar los beneficios de la IA, el informe propone tres áreas principales de acción política:

(1) Fomentar los principios de la ciencia abierta (datos, modelos e infraestructura abiertos) para garantizar la reproducibilidad y la confiabilidad.

(2) Realizar una inversión estratégica en infraestructura de Computación de Alto Rendimiento (HPC), ‘Fábricas de IA’ y repositorios de datos científicos abiertos.

(3) Impulsar el desarrollo de un nuevo conjunto de habilidades en los investigadores, promoviendo equipos «híbridos» que combinen experiencia en el dominio científico con métodos avanzados de IA y ciencia de datos.